La casa Santa María de los Milagros celebra el Día del Enfermo

El pasado lunes 10 de febrero, organizamos con motivo de la celebración del Día del Enfermo,  una merienda en la Casa Santa María de los Milagros. En un ambiente agradable y cercano, voluntarios, personal que participa en el proyecto y las personas que viven en la casa participamos de manera sencilla en esta merienda compartida. También nos acompañó nuestra amiga Almudena, una cantautora que nos alegró con sus canciones e hizo de este un rato un momento muy agradable.

Para Cáritas y en especial para la Casa Sata María de los Milagros, el 11 de febrero, Día del Enfermo, es una jornada muy importante ya que nos hace pensar en aquellas personas que por algún tipo de dolencia o enfermedad se encuentran hospitalizadas o en un estado de vulnerabilidad. Este día tiene como objetivo manifiesto, sensibilizar a toda la población y, por consiguiente, a las varias instituciones sanitarias católicas y a la misma sociedad civil, ante la necesidad de asegurar la mejor asistencia posible a los enfermos: ayudar al enfermo a valorar el sufrimiento; favorecer el compromiso cada vez más valioso del voluntariado, recordar la importancia de la formación espiritual y moral de los agentes sanitarios y en sentido general, sensibilizarnos con estas personas que no pasan por un buen momento en sus vidas. Como comenta Mamen Román, técnica de la casa, “nos gusta significar este día, porque detrás de cada enfermo está la historia de la persona, el empeño, la soledad, el dolor, las alegrías y esperanzas y en este día se encierra toda la fortaleza que Dios nos da para afrontar y superar todas esas situaciones, donde parece que no hay salida”.

Santa María de los Milagros es una casa de acogida para personas en situación de sin hogar y que además atraviesan una enfermedad. En esta casa se acogen a personas con diferentes realidades: recibimos a personas inmigrantes que salieron de sus países con esperanza de encontrar un futuro mejor y se encontraron con una enfermedad que se lo impidió, personas en situación de sinhogarismo y que cuando caen enfermas necesitan unos cuidados específicos, personas abandonadas por su familia porque la enfermedad se convierte en un peso para ellos… En definitiva, la casa es un espacio de recuperación y fortalecimiento de su salud. Durante el periodo que estén en la casa, las personas tienen cubiertas todas sus necesidades básicas, tratamiento médico, acompañamiento, actividades para la mejora personal y de autoestima… Se les brinda un espacio donde se sientan acogidas y queridas, donde se les ayude a serenarse y estar en paz consigo mismas. Además, cuando la situación de la persona es terminal se les acompaña en el duelo y en la aceptación de su final.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *