Huelva, 25 de junio de 2020. La directora de Cáritas Diocesana de Huelva, Pilar Vizcaíno junto con la Responsable del Departamento de Comunicación y Relaciones Externas, Peña Monje, han presentado la Memoria General 2019, un documento que recoge la realidad del trabajo de nuestra entidad y que supone una radiografía muy real de la situación de la Diócesis de Huelva contada desde el trabajo diario de los 75 equipos de Cáritas Parroquiales que existen en la provincia y desde los Servicios Diocesanos.
Cáritas Diocesana de Huelva ha atendido en 2019 a 11.077 personas, lo que supone una reducción de 3.014 personas con respecto a 2018. Este hecho se produce por la tendencia de estos últimos años, donde ha habido un repunte en la economía, más acceso al empleo y menos personas que tienen la necesidad de acudir a Cáritas.
Este año, el grado de participación de las Cáritas Parroquiales en la elaboración de la Memoria de Cáritas 2019 ha llegado al 88% del total, lo que hace ver el esfuerzo que están llevando a cabo los centros parroquiales en un ejercicio de transparencia. Hay que reconocer el trabajo de estos equipos, que hacen un esfuerzo continuo para atender a las personas más necesitadas de Huelva.
Las personas atendidas son aquellas que acuden a Cáritas, son los rostros que vemos y que, potencialmente, podrían formar parte de procesos de acompañamiento y participación. Por otro lado, debemos cuantificar las personas beneficiadas de la labor de Cáritas Diocesana de Huelva, que son aquellas que sin acudir directamente a Cáritas se ven beneficiadas por la acción que recibe algún miembro de la familia. Por último, tenemos en cuenta las atenciones realizadas que sumaron 124.805 en total, esto supone una subida de un 2% con respecto a la del pasado año. Esto se debe a que el trabajo con las personas atendidas se realiza de forma integral, acompañando las necesidades de manera específica desde nuestro modelo de acción social.
El marco social en el que Cáritas Diocesana de Huelva ha desarrollado su acción durante el año pasado ha venido marcado por una notable precariedad en muchas de las familias a las que atendemos y también una profundización en un modelo laboral basado en la escasez de recursos económicos de las familias y la falta de formación.
Con este escenario, Cáritas Diocesana de Huelva ha realizado su acción durante el pasado año priorizando el acompañamiento a las personas más vulnerables, proporcionando recursos para ayudarles a salir de su situación o paliar la gravedad de la misma, adaptándolos a sus necesidades y siguiendo con un modelo de trabajo centrado en el acompañamiento. Ya que las ayudas que Cáritas da no se basan solo en la alimentación, es un abanico amplio, que va desde los gastos en farmacia, ópticas, dentistas, electricidad, electrodomésticos, suministros, ayudas para el pago de los alquileres. En definitiva, llegando a esos gastos imprevistos que las familias no pueden asumir.
Detectamos dos perfiles importantes. Por un lado personas solicitantes de asilo, sin ingresos, en su mayoría con formación pero sin homologar y con familias a su cargo. Por otro lado, son personas nacionales, en su mayoría mujeres con hijos a su cargo, mayores de 45 años, o jóvenes con carencias educativas, escasa experiencia laboral, falta de formación y, en gran medida, con cargas familiares.
Atención especializada para la promoción y el desarrollo de las personas
Esta es la línea de trabajo que desarrolla Cáritas Diocesana de Huelva con el fin de favorecer la inclusión a las personas atendiendo las necesidades específicas del colectivo al que pertenecen. Así, Cáritas Diocesana de Huelva pone en valor cifras como las 125 personas, de los 311 participantes del Programa de Empleo, que encontraron trabajo el pasado año, la atención a 767 personas sin hogar a través del Centro de Día Puertas Abiertas y las Casas de Acogida, Santa María y Santa María de los Milagros; 1023 personas y familias acompañadas en proyectos de infancia, acompañamiento familiar y mayores y 993 migrantes en el Programa de Atención en Asentamientos.
Más de dos millones invertidos en personas
Cáritas Diocesana de Huelva invirtió el año pasado un total de 2.473.102 €. Esta cifra es fruto de la inversión de fuentes públicas, privadas, de donaciones y legados y por supuesto, de los ingresos de las Cáritas Parroquiales. El desarrollo de nuestra acción y la inversión que dedicamos no sería posible sin el factor humano que hace posible que Cáritas esté al lado de quienes más lo necesitan.
Recalcar que un gran porcentaje de estos recursos provienen de las aportaciones directas de la comunidad cristiana onubense a través de campañas, colectas y acciones puntuales promovidas por la Iglesia de Huelva.
Una labor importante la desarrollan los voluntarios que participan en Cáritas Diocesana de Huelva, ya sea en la atención en Parroquias o en los distintos centros ubicados en las instalaciones de la calle Doctor Cantero Cuadrado, sin los cuales sería imposible llevar esta labor. En total, 757 voluntarios han participado en nuestra acción en el año 2019. También queremos agradecer la colaboración de 46 empresas en 2019, que han permitido, de una u otra manera, facilitar recursos muy necesarios a muchas familias y las donaciones y el apoyo de 242 hermandades.
El poder de cada persona, cada gesto cuenta
Es el lema de nuestra campaña de Caridad de este año “El poder de cada persona, cada gesto cuenta” que titula la memoria que hoy presentamos también por este motivo.
Con este mensaje queremos poner en valor la generosidad de miles de ciudadanos que han prestado sus servicios, donado sus recursos o articulado mecanismos desde la más absoluta creatividad para apoyar económicamente nuestra acción social.
Desde la institución agradecemos cada gesto y animamos a la ciudadanía a seguir colaborando con aquellos que están pasando por un mal momento debido a la crisis. Como reza nuestro lema entorno al día de la Caridad, cada persona tiene el poder de cambiar las cosas con pequeños gestos. Es momento de construir juntos y junto a quien más lo necesita.
#ElPoderDeCadaPersona
#CadaGestoCuenta