‘Puertas Abiertas’ se compromete con las personas sin hogar

Desde que comenzó la pandemia, en Cáritas Diocesana de Huelva se han mantenido todos los proyectos y, actualmente, se siguen atendiendo a los mismos colectivos que antes de la crisis. Para ello hemos tenido que hacer un gran esfuerzo a la hora de tomar medidas de prevención, tanto para las personas que trabajamos en el día a día como para las personas a las que atendemos. Para estas personas somos el único  soporte vital con el que cuentan, ya que en muchos casos carecen de esa red social y familiar de apoyo tan importante en momentos de crisis.

El colectivo habitual que se atiende desde el área es el de las personas sin hogar. Cuando el confinamiento fue una obligación nos encontramos con muchas personas incapaces de cumplirlo, simplemente porque carecían del espacio físico en el que pasarlo o porque ese espacio no reunía las mínimas condiciones de habitabilidad, o de acceso a agua o luz. Si ya antes trabajamos con personas en exclusión social o en una situación de vulnerabilidad elevada, los últimos acontecimientos han agravado esta realidad aún más.

Puertas Abiertas, el centro de día que se constituye como un espacio de primera atención a las personas en situación de sin hogar de la provincia de Huelva, está manteniendo los servicios fundamentales del proyecto, respetando todas las medidas de seguridad que se recomiendan seguir para no propagar el virus. La única particularidad ha sido reducir el aforo manteniendo de esta forma la distancia social, las mesas para el desayuno están separadas y solo puede sentarse una persona, se toma la temperatura antes de entrar al centro, se ha extremado la higiene y la desinfección de las instalaciones. Además, se siguen ofreciendo los servicios de desayuno, duchas y aseo, lavandería, taquillas y prensa. El número de personas atendidas diariamente oscila entre las 40 y 50.

Cabe destacar la importancia de contar con una red sólida y organizada de voluntarios que no han faltado a su labor y han hecho posible la atención integral y personal a todas las persona que han venido cada día a nuestro centro. “Sin ellos no hubiera sido posible abrir nuestros servicios”, expresa Josema Gómez, responsable del centro de Puertas Abiertas.

Comienzan los talleres de intervención y educación familiar

Entre las diferentes acciones que se realizan desde el Área de Familia en las parroquias de Huelva ciudad cabe destacar el trabajo de intervención y educación familiar que se viene realizando en varias parroquias desde hace más de cinco años. Se trata de una acción que se va consolidando en algunas parroquias de la periferia de Huelva  como son la de San Fco de Asís, la de Sagrada Familia, Ntra Sra del Carmen y Ntra Sra de los Dolores, que siguen apostando por tratar de ofrecer una respuesta integral a las problemáticas y necesidades detectadas en las familias atendidas.

Esta semana han comenzado los talleres educativos con temáticas diversas donde se van trabajando las diferentes áreas: personal, relaciones familiares, relaciones sociales, economía familiar, salud, etc.

En ellos participan mujeres jóvenes con graves dificultades socioeconómicas, a las que se acompaña durante varios meses con el fin de promover su desarrollo y crecimiento personal, detectando y trabajando sus carencias y reforzando sus capacidades o potencialidades de manera que se conviertan en protagonistas de su proceso de cambio, y se involucren más en la resolución de sus problemas.

La ventaja de trabajar de forma grupal es el poder generar espacios de relación, de encuentro y de aprendizaje donde se acompaña a las mujeres desde la cercanía, desde la cotidianeidad de sus circunstancias. Es un lugar donde ellas pueden abrirse y compartir miedos, dificultades y logros, reducir el estrés y la ansiedad, donde se potencia el conocimiento personal y puedan reconocerse como personas valiosas y capaces de mejorar su vida.

Hay que tener en cuenta que estas mujeres, que en su mayoría son portadoras de la situación propia y la de sus familias y llevan el peso de los problemas, no disponen de espacios de aprendizaje, de apoyo, de escucha de sus preocupaciones e incluso de ocio. El trabajo en grupo se convierte para ellas es un espacio no sólo de aprendizaje sino también de terapia personal. Supone un tiempo que dedican a ellas mismas, al encuentro consigo mismas y con las demás.

La experiencia de los voluntarios en estos años con los diferentes grupos de mujeres con los que se ha ido trabajando está siendo muy positiva y satisfactoria, al ver que el trabajo y el esfuerzo va  dando sus frutos, al contemplar cómo muchas de ellas han conseguido avances en muchos aspectos de sus vidas tanto a nivel personal  como familiar. Todo lo aprendido les ha servido para crecer como personas, sentirse escuchadas, valoradas, aceptadas y queridas.  Es fundamentalmente un espacio para la toma de conciencia y para el cambio, el que muchas de ellas comienzan han experimentado.

Pepi Rodríguez y Manoli Maestre, voluntarias que imparte el taller de Desarrollo Personal y Habilidades parentales, nos cuentan que les aporta una satisfacción norme: “poder aportar tu experiencia y conocimiento a un grupo de mujeres que quieren hacer cambios en su vida es muy importante para mí”, cuenta Pepi. “Si mi forma y experiencia de vida puede contribuir a que otra persona tenga otra perspectiva para afrontar su situación, mi voluntariado tiene sentido”, expresa Manoli.

«Siento que este taller me va a cambiar la vida. Ya, desde que empezó no soy la que era: dejé de mendigar amor y de compadecerme de mí misma; empecé a valorar lo maravillosa que soy porque, aparte de poder dar vida, he ganado en ganas de vivir; dejé mis lágrimas y las cambie por sonrisas, por muy mal que me pueda sentir en algún; dejé de ser víctima para convertirme en princesa de mi propia historia… Recuerdo mis primeros días de taller y, sin exagerar, me asombro de todo lo que he conseguido y de las ganas que tengo de seguir creciendo como persona, seguir aprendiendo, aceptando y sintiendo todas mis emociones. Soy una mujer con propósitos, no estoy acomodada como antes. Ahora me gusta seguir y conseguir lo que siempre he soñado. Sólo puedo deciros: compañeras, aprovechar este regalo de la vida, porque estas oportunidades no pasan todos los días, si quieres que cambie tu vida y tu casa. ¡Os animo a todas! «

Rocío, madre de familia y luchadora, del barrio Pérez Cubillas (Huelva)

Cáritas y la Fundación Endesa clausuran un curso de montaje de instalaciones eléctricas y aire acondicionado

Huelva, 11 de septiembre de 2020.- Cáritas Diocesana de Huelva y la Fundación Endesa han clausurado en la capital onubense la octava edición del curso de Montaje de instalaciones eléctricas y aire acondicionado en edificios que organizan conjuntamente ambas instituciones y del que se han beneficiado ya un total de 96 jóvenes, contando los 12 de esta edición.

El curso, que en anteriores ediciones se centraba en las ‘Operaciones auxiliares de montaje de instalaciones electrotécnicas y de telecomunicaciones en edificios’, se ha transformado desde el curso pasado en el ‘Montaje de instalaciones eléctricas y aire acondicionado en edificios’, debido a la alta demanda de instaladores de aire acondicionado en la provincia de Huelva en los meses de junio a septiembre.

Cáritas Diocesana de Huelva y la Fundación Endesa han apostado por esta formación desde el principio ya que la carencia formativa es una de las barreras fundamentales para encontrar un puesto de trabajo. De la situación de pobreza no sólo se sale con aportaciones económicas, sino que hay que dar un salto e invertir en acciones formativas que capaciten a las personas para el trabajo, algo que entiende muy bien la Fundación Endesa que desde hace años viene apoyando procesos formativos en Cáritas Diocesana de Huelva.

La acción formativa ha tenido una duración de cuatro meses. Este año, a causa del Covid-19 Cáritas Diocesana de Huelva tuvo que interrumpir sus clases y se reiniciaron en junio, con una parte teórica y otra práctica que alcanza en total las 480 horas y 100 horas de práctica. Los 12 alumnos han estudiado temas específicos sobre las instalaciones eléctricas y el montaje de aire acondicionado y también contenidos transversales como la igualdad de género, el medioambiente, las habilidades sociales y las nuevas tecnologías. Contamos con unas empresas colaboradoras con Cáritas de otros años como Tecsolar Huelva, Cfrica sl, Frío Alberto SL, Soctefrí SL y  Hairelight SL.

En toda España, el convenio suscrito entre Cáritas y la Fundación Endesa ha permitido que 400 jóvenes de diversos lugares de España, donde Endesa tiene un especial arraigo, estudiaran el oficio de electricista. Aquí en Huelva, la colaboración entre ambas entidades ha facilitado la inserción en el mundo laboral o su retorno a la educación reglada tras conseguir el certificado de profesionalidad.

Cáritas Diocesana de Huelva hace un llamamiento para realizar un voluntariado en su entidad

En Cáritas nos encontramos en una búsqueda constante de personas voluntarias que quieran ser parte de nuestra acción. Para que podamos llevar a cabo nuestra misión, necesitamos organizarnos y contar con personas voluntarias con las que nos podamos hacer presentes en las distintas realidades de onubenses que actualmente viven la injusticia de la pobreza. Esta pandemia ha hecho visible la indefensión de muchas personas y por ello queremos seguir apostando por ver a cada ser como ese milagro de Dios, por encima de la situación de precariedad en la que se encuentre.

Para realizar este trabajo, las personas voluntarias son el pilar básico e insustituible de la acción de Cáritas. El voluntariado es importante porque realiza su propia tarea aportando su tiempo, su acompañamiento y sus saberes, tareas que junto a la labor técnica, completa el acompañamiento de la realidad en concreto.

Por nuestra parte, estamos colaborando y cumpliendo todas las medidas señaladas para protegernos, por ello, nuestros espacios están adaptados para realizar un voluntariado seguro, cumpliendo todas las medidas de higiene y seguridad exigidas.

Por ello, después del verano, creemos que es un buen momento para hacer un llamamiento a todas aquellas personas que quieran colaborar con nuestra entidad, conociendo la realidad, atendiendo y acompañamando a las personas que más necesitan de nuestro tiempo y apoyo. En concreto, tu esfuerzo como persona voluntaria se orientará a todas aquellas peronas que no disponen de una vivienda digna, que carecen de recursos, de lazos comunitarios y familiares.

Los espacios de voluntariado concreto serían en tres proyectos:

  • Centro de Día Puertas Abiertas: espacio de primera atención a personas en situación de sin hogar de la provincia de Huelva. En él se ofrecen servicios específicos como acogida, cafetería y prensa, orientación e información, duchas,  ropero, lavandería…
  • Casa de Acogida Santa María: espacio residencial durante las 24 horas para personas en situación de exclusión, prestando una acogia integral para normalizar su sitaución.
  • Casa de Acogida Santa María de los Milagros: esta casa tiene como objetvo dar respuesta a los problemas de salud de las personas sin hogar o aquellas otras que tenindolo se encuentran desamparadas o sin cobertuda social.

Las funciones concretas en estos espacios serían el acompañamiento en ambas casas de acogida: gestiones sanitarias, citas médicas, ir a hacer la compra… además de un acompañamiento en las tareas de cocina para ambos proyectos.

El voluntariado es el motor de Cáritas ya que es esencial para llevar a cabo nuestro trabajo y nuestra misión. Es la gran riqueza con la que contamos ya que entre todos acompañamos, promovemos, dinamizamos y estamos comprometidos con la realidad que vivimos. Es la hora de una Caridad creativa y responsable para decir a los más vulnerables: estamos aquí, ¡nos comprometemos e implicamos en vuestra realidad!

Las personas que estén interesadas en saber más acerca de los proyectos y sus funciones, y quieran ser parte de nuestra acción pueden contactar con nosotros mediante nuestro número de teléfono 959 24 52 26 o escribir al correo fnarvaez.formacion@caritashuelva.org.

Día de Oración por el Cuidado de la Creación: La COVID-19 supone una llamada a respetar nuestro hogar común

Con motivo del Día Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, que se celebra hoy, Cáritas Internationalis ha difundido el siguiente comunicado:

El 1 de septiembre de 2020 es el Día Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación y esta es una oportunidad importante para celebrar la riqueza de la fe cristiana como expresión a la hora de proteger nuestro hogar común.

Como seguidores de Cristo, compartimos un papel común como administradores de la Creación de Dios, recordando que nuestro bienestar está vinculado al bienestar de nuestra madre tierra. También es un momento para renovar nuestros corazones y mentes, y tomar conciencia de que al reconstruir nuestra relación con la Madre Tierra estamos restaurando nuestra relación con Dios.

En estos meses en los que nuestro mundo globalizado se ha visto gravemente afectado por la pandemia de COVID-19, nos hemos dado cuenta de cómo compartimos una misma naturaleza humana y de lo interconectadas que están las dimensiones política, económica, social, espiritual y cultural. Hemos comprendido cómo los sistemas injustos han creado un entorno propicio para la propagación de enfermedades, cuán frágiles son nuestras vidas y cuán vulnerables éramos ante el virus. Al mismo tiempo, la pandemia se ha convertido en una oportunidad para que nos unamos para defender vidas y asegurarnos de no ser víctimas del virus. Y también es una oportunidad para que surja una nueva forma de solidaridad.

Las organizaciones miembros de Caritas comenzaron a trabajar desde el primer momento con las comunidades locales para luchar contra la propagación de la enfermedad. A medida que nuestro mundo globalizado se ha ido volviendo viral, hemos difundido lo que nuestro presidente, el cardenal Tagle, ha llamado la “pandemia del amor y la solidaridad”, que continúa tomando forma en diferentes partes del mundo.

En esta particular Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, Cáritas Internationalis propone reflexionar sobre nuestros roles y responsabilidades en la construcción de una sociedad justa y equitativa que brinde la posibilidad a todos y cada uno de nosotros de vivir con dignidad y en armonía con la Madre Tierra. Como cristianos, nuestra relación con el medio ambiente nunca puede estar aislada de nuestra relación con los demás y con Dios, y la COVID-19 debe ser para nosotros una llamada a respetar nuestro hogar común.

Como recordó el Papa Francisco durante su catequesis del 26 de agosto, este hogar fue entregado por Dios a todo el género humano y, como administradores de la Creación, estamos llamados a hacer que sus frutos, de hecho, sean compartidos por todos. Pero, lamentablemente, la realidad que observamos todos los días haciendo nuestro trabajo al lado de las comunidades locales de todo el mundo está muy lejos de ello. Estas comunidades locales son las primeras víctimas de la falta de protección de nuestra Casa común y hoy nos piden una acción específica e inmediata, especialmente en lo que respecta a la seguridad alimentaria, el acceso al agua y la preservación de los ecosistemas.

Caritas está convencida de que el desarrollo humano integral solo puede promoverse si:

– Se protege y nutre la vida, y se asegura la sostenibilidad de los sistemas ecológicos, económicos, sociales y políticos. Es responsabilidad de cada uno de nosotros asumir este reto de forma individual y colectiva.

– Se reconocen las capacidades únicas de conocimiento, voluntad, libertad y responsabilidad de los seres humanos. De lo contrario, no podemos esperar que se sientan responsables del mundo. En todo el planeta, Caritas está comprometida con el desarrollo de la capacidad de las personas y la sensibilización de base.

– El nuevo comienzo posterior a COVID-19 impulsa nuevas formas de vida, justas y sostenibles, tomando en consideración la interconexión entre el respeto por la tierra y unos estilos de vida sostenibles en los ámbitos ecológicos, económicos, sociales y políticos.

– Todos los responsables en la toma de decisiones adoptan e implementan políticas valientes para preservar el medio ambiente.

En esta jornada, Cáritas Internationalis se une al llamamiento del Santo Padre de tomar medidas audaces para salvaguardar nuestra casa común, orar y actuar para construir una comunidad de solidaridad y amor.