Comienzan los talleres de intervención y educación familiar

Entre las diferentes acciones que se realizan desde el Área de Familia en las parroquias de Huelva ciudad cabe destacar el trabajo de intervención y educación familiar que se viene realizando en varias parroquias desde hace más de cinco años. Se trata de una acción que se va consolidando en algunas parroquias de la periferia de Huelva  como son la de San Fco de Asís, la de Sagrada Familia, Ntra Sra del Carmen y Ntra Sra de los Dolores, que siguen apostando por tratar de ofrecer una respuesta integral a las problemáticas y necesidades detectadas en las familias atendidas.

Esta semana han comenzado los talleres educativos con temáticas diversas donde se van trabajando las diferentes áreas: personal, relaciones familiares, relaciones sociales, economía familiar, salud, etc.

En ellos participan mujeres jóvenes con graves dificultades socioeconómicas, a las que se acompaña durante varios meses con el fin de promover su desarrollo y crecimiento personal, detectando y trabajando sus carencias y reforzando sus capacidades o potencialidades de manera que se conviertan en protagonistas de su proceso de cambio, y se involucren más en la resolución de sus problemas.

La ventaja de trabajar de forma grupal es el poder generar espacios de relación, de encuentro y de aprendizaje donde se acompaña a las mujeres desde la cercanía, desde la cotidianeidad de sus circunstancias. Es un lugar donde ellas pueden abrirse y compartir miedos, dificultades y logros, reducir el estrés y la ansiedad, donde se potencia el conocimiento personal y puedan reconocerse como personas valiosas y capaces de mejorar su vida.

Hay que tener en cuenta que estas mujeres, que en su mayoría son portadoras de la situación propia y la de sus familias y llevan el peso de los problemas, no disponen de espacios de aprendizaje, de apoyo, de escucha de sus preocupaciones e incluso de ocio. El trabajo en grupo se convierte para ellas es un espacio no sólo de aprendizaje sino también de terapia personal. Supone un tiempo que dedican a ellas mismas, al encuentro consigo mismas y con las demás.

La experiencia de los voluntarios en estos años con los diferentes grupos de mujeres con los que se ha ido trabajando está siendo muy positiva y satisfactoria, al ver que el trabajo y el esfuerzo va  dando sus frutos, al contemplar cómo muchas de ellas han conseguido avances en muchos aspectos de sus vidas tanto a nivel personal  como familiar. Todo lo aprendido les ha servido para crecer como personas, sentirse escuchadas, valoradas, aceptadas y queridas.  Es fundamentalmente un espacio para la toma de conciencia y para el cambio, el que muchas de ellas comienzan han experimentado.

Pepi Rodríguez y Manoli Maestre, voluntarias que imparte el taller de Desarrollo Personal y Habilidades parentales, nos cuentan que les aporta una satisfacción norme: “poder aportar tu experiencia y conocimiento a un grupo de mujeres que quieren hacer cambios en su vida es muy importante para mí”, cuenta Pepi. “Si mi forma y experiencia de vida puede contribuir a que otra persona tenga otra perspectiva para afrontar su situación, mi voluntariado tiene sentido”, expresa Manoli.

«Siento que este taller me va a cambiar la vida. Ya, desde que empezó no soy la que era: dejé de mendigar amor y de compadecerme de mí misma; empecé a valorar lo maravillosa que soy porque, aparte de poder dar vida, he ganado en ganas de vivir; dejé mis lágrimas y las cambie por sonrisas, por muy mal que me pueda sentir en algún; dejé de ser víctima para convertirme en princesa de mi propia historia… Recuerdo mis primeros días de taller y, sin exagerar, me asombro de todo lo que he conseguido y de las ganas que tengo de seguir creciendo como persona, seguir aprendiendo, aceptando y sintiendo todas mis emociones. Soy una mujer con propósitos, no estoy acomodada como antes. Ahora me gusta seguir y conseguir lo que siempre he soñado. Sólo puedo deciros: compañeras, aprovechar este regalo de la vida, porque estas oportunidades no pasan todos los días, si quieres que cambie tu vida y tu casa. ¡Os animo a todas! «

Rocío, madre de familia y luchadora, del barrio Pérez Cubillas (Huelva)

Cáritas y la Fundación Endesa clausuran un curso de montaje de instalaciones eléctricas y aire acondicionado

Huelva, 11 de septiembre de 2020.- Cáritas Diocesana de Huelva y la Fundación Endesa han clausurado en la capital onubense la octava edición del curso de Montaje de instalaciones eléctricas y aire acondicionado en edificios que organizan conjuntamente ambas instituciones y del que se han beneficiado ya un total de 96 jóvenes, contando los 12 de esta edición.

El curso, que en anteriores ediciones se centraba en las ‘Operaciones auxiliares de montaje de instalaciones electrotécnicas y de telecomunicaciones en edificios’, se ha transformado desde el curso pasado en el ‘Montaje de instalaciones eléctricas y aire acondicionado en edificios’, debido a la alta demanda de instaladores de aire acondicionado en la provincia de Huelva en los meses de junio a septiembre.

Cáritas Diocesana de Huelva y la Fundación Endesa han apostado por esta formación desde el principio ya que la carencia formativa es una de las barreras fundamentales para encontrar un puesto de trabajo. De la situación de pobreza no sólo se sale con aportaciones económicas, sino que hay que dar un salto e invertir en acciones formativas que capaciten a las personas para el trabajo, algo que entiende muy bien la Fundación Endesa que desde hace años viene apoyando procesos formativos en Cáritas Diocesana de Huelva.

La acción formativa ha tenido una duración de cuatro meses. Este año, a causa del Covid-19 Cáritas Diocesana de Huelva tuvo que interrumpir sus clases y se reiniciaron en junio, con una parte teórica y otra práctica que alcanza en total las 480 horas y 100 horas de práctica. Los 12 alumnos han estudiado temas específicos sobre las instalaciones eléctricas y el montaje de aire acondicionado y también contenidos transversales como la igualdad de género, el medioambiente, las habilidades sociales y las nuevas tecnologías. Contamos con unas empresas colaboradoras con Cáritas de otros años como Tecsolar Huelva, Cfrica sl, Frío Alberto SL, Soctefrí SL y  Hairelight SL.

En toda España, el convenio suscrito entre Cáritas y la Fundación Endesa ha permitido que 400 jóvenes de diversos lugares de España, donde Endesa tiene un especial arraigo, estudiaran el oficio de electricista. Aquí en Huelva, la colaboración entre ambas entidades ha facilitado la inserción en el mundo laboral o su retorno a la educación reglada tras conseguir el certificado de profesionalidad.

Cáritas Diocesana de Huelva hace un llamamiento para realizar un voluntariado en su entidad

En Cáritas nos encontramos en una búsqueda constante de personas voluntarias que quieran ser parte de nuestra acción. Para que podamos llevar a cabo nuestra misión, necesitamos organizarnos y contar con personas voluntarias con las que nos podamos hacer presentes en las distintas realidades de onubenses que actualmente viven la injusticia de la pobreza. Esta pandemia ha hecho visible la indefensión de muchas personas y por ello queremos seguir apostando por ver a cada ser como ese milagro de Dios, por encima de la situación de precariedad en la que se encuentre.

Para realizar este trabajo, las personas voluntarias son el pilar básico e insustituible de la acción de Cáritas. El voluntariado es importante porque realiza su propia tarea aportando su tiempo, su acompañamiento y sus saberes, tareas que junto a la labor técnica, completa el acompañamiento de la realidad en concreto.

Por nuestra parte, estamos colaborando y cumpliendo todas las medidas señaladas para protegernos, por ello, nuestros espacios están adaptados para realizar un voluntariado seguro, cumpliendo todas las medidas de higiene y seguridad exigidas.

Por ello, después del verano, creemos que es un buen momento para hacer un llamamiento a todas aquellas personas que quieran colaborar con nuestra entidad, conociendo la realidad, atendiendo y acompañamando a las personas que más necesitan de nuestro tiempo y apoyo. En concreto, tu esfuerzo como persona voluntaria se orientará a todas aquellas peronas que no disponen de una vivienda digna, que carecen de recursos, de lazos comunitarios y familiares.

Los espacios de voluntariado concreto serían en tres proyectos:

  • Centro de Día Puertas Abiertas: espacio de primera atención a personas en situación de sin hogar de la provincia de Huelva. En él se ofrecen servicios específicos como acogida, cafetería y prensa, orientación e información, duchas,  ropero, lavandería…
  • Casa de Acogida Santa María: espacio residencial durante las 24 horas para personas en situación de exclusión, prestando una acogia integral para normalizar su sitaución.
  • Casa de Acogida Santa María de los Milagros: esta casa tiene como objetvo dar respuesta a los problemas de salud de las personas sin hogar o aquellas otras que tenindolo se encuentran desamparadas o sin cobertuda social.

Las funciones concretas en estos espacios serían el acompañamiento en ambas casas de acogida: gestiones sanitarias, citas médicas, ir a hacer la compra… además de un acompañamiento en las tareas de cocina para ambos proyectos.

El voluntariado es el motor de Cáritas ya que es esencial para llevar a cabo nuestro trabajo y nuestra misión. Es la gran riqueza con la que contamos ya que entre todos acompañamos, promovemos, dinamizamos y estamos comprometidos con la realidad que vivimos. Es la hora de una Caridad creativa y responsable para decir a los más vulnerables: estamos aquí, ¡nos comprometemos e implicamos en vuestra realidad!

Las personas que estén interesadas en saber más acerca de los proyectos y sus funciones, y quieran ser parte de nuestra acción pueden contactar con nosotros mediante nuestro número de teléfono 959 24 52 26 o escribir al correo fnarvaez.formacion@caritashuelva.org.

Día de Oración por el Cuidado de la Creación: La COVID-19 supone una llamada a respetar nuestro hogar común

Con motivo del Día Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, que se celebra hoy, Cáritas Internationalis ha difundido el siguiente comunicado:

El 1 de septiembre de 2020 es el Día Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación y esta es una oportunidad importante para celebrar la riqueza de la fe cristiana como expresión a la hora de proteger nuestro hogar común.

Como seguidores de Cristo, compartimos un papel común como administradores de la Creación de Dios, recordando que nuestro bienestar está vinculado al bienestar de nuestra madre tierra. También es un momento para renovar nuestros corazones y mentes, y tomar conciencia de que al reconstruir nuestra relación con la Madre Tierra estamos restaurando nuestra relación con Dios.

En estos meses en los que nuestro mundo globalizado se ha visto gravemente afectado por la pandemia de COVID-19, nos hemos dado cuenta de cómo compartimos una misma naturaleza humana y de lo interconectadas que están las dimensiones política, económica, social, espiritual y cultural. Hemos comprendido cómo los sistemas injustos han creado un entorno propicio para la propagación de enfermedades, cuán frágiles son nuestras vidas y cuán vulnerables éramos ante el virus. Al mismo tiempo, la pandemia se ha convertido en una oportunidad para que nos unamos para defender vidas y asegurarnos de no ser víctimas del virus. Y también es una oportunidad para que surja una nueva forma de solidaridad.

Las organizaciones miembros de Caritas comenzaron a trabajar desde el primer momento con las comunidades locales para luchar contra la propagación de la enfermedad. A medida que nuestro mundo globalizado se ha ido volviendo viral, hemos difundido lo que nuestro presidente, el cardenal Tagle, ha llamado la “pandemia del amor y la solidaridad”, que continúa tomando forma en diferentes partes del mundo.

En esta particular Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación, Cáritas Internationalis propone reflexionar sobre nuestros roles y responsabilidades en la construcción de una sociedad justa y equitativa que brinde la posibilidad a todos y cada uno de nosotros de vivir con dignidad y en armonía con la Madre Tierra. Como cristianos, nuestra relación con el medio ambiente nunca puede estar aislada de nuestra relación con los demás y con Dios, y la COVID-19 debe ser para nosotros una llamada a respetar nuestro hogar común.

Como recordó el Papa Francisco durante su catequesis del 26 de agosto, este hogar fue entregado por Dios a todo el género humano y, como administradores de la Creación, estamos llamados a hacer que sus frutos, de hecho, sean compartidos por todos. Pero, lamentablemente, la realidad que observamos todos los días haciendo nuestro trabajo al lado de las comunidades locales de todo el mundo está muy lejos de ello. Estas comunidades locales son las primeras víctimas de la falta de protección de nuestra Casa común y hoy nos piden una acción específica e inmediata, especialmente en lo que respecta a la seguridad alimentaria, el acceso al agua y la preservación de los ecosistemas.

Caritas está convencida de que el desarrollo humano integral solo puede promoverse si:

– Se protege y nutre la vida, y se asegura la sostenibilidad de los sistemas ecológicos, económicos, sociales y políticos. Es responsabilidad de cada uno de nosotros asumir este reto de forma individual y colectiva.

– Se reconocen las capacidades únicas de conocimiento, voluntad, libertad y responsabilidad de los seres humanos. De lo contrario, no podemos esperar que se sientan responsables del mundo. En todo el planeta, Caritas está comprometida con el desarrollo de la capacidad de las personas y la sensibilización de base.

– El nuevo comienzo posterior a COVID-19 impulsa nuevas formas de vida, justas y sostenibles, tomando en consideración la interconexión entre el respeto por la tierra y unos estilos de vida sostenibles en los ámbitos ecológicos, económicos, sociales y políticos.

– Todos los responsables en la toma de decisiones adoptan e implementan políticas valientes para preservar el medio ambiente.

En esta jornada, Cáritas Internationalis se une al llamamiento del Santo Padre de tomar medidas audaces para salvaguardar nuestra casa común, orar y actuar para construir una comunidad de solidaridad y amor.

La Fundación Endesa, Fondo Social Europeo y Cáritas Diocesana de Huelva inauguran un pretaller laboral de mantenimiento de instalaciones

Huelva, 21 de julio de 2020. Un total de 12 personas procedentes de los proyectos de Cáritas y de las Cáritas Parroquiales de la provincia de Huelva, han iniciado un pretaller laboral de mantenimiento de instalaciones, gracias al apoyo formativo de la Fundación Endesa y el Fondo Social Europeo.

Este pretaller en la provincia de Huelva surge al encontrar un potencial de empleo muy importante en los trabajos de mantenimiento e instalación en edificios. Esto se debe al gran número de empresas dedicadas al sector hostelero, así como a la existencia de uno de los polos industriales mayores de Europa, al que hay que sumar las empresas subsidiarias que trabajan para él. Precisamente esta necesidad ha llevado a la Fundación Endesa y a Cáritas Diocesana de Huelva a establecer acciones formativas que capaciten a las personas, en situación de vulnerabilidad o exclusión, para optar a esas ocupaciones, ya que la carencia formativa es una de las barreras fundamentales para encontrar un empleo.

El curso impartido esta semana tiene una duración de 620 horas y cuenta con varios módulos que tratarán temas muy diversos como electricidad, fontanería, albañilería, pintura, limpieza y jardinería, carpintería, y un módulo especial sobre habilidades sociales.

Todos estos cursos incluyen una parte transversal donde se trabajará la igualdad, la sensibilización medioambiental, la alfabetización digital, la prevención en riesgos laborales y los derechos laborales. Esto contribuirá a que los 12 participantes desarrollen sus habilidades sociales y laborales, mejorando su grado de empleabilidad.

El perfil de los participantes es muy variado. Fundamentalmente se trata de  personas en situación o riesgo de pobreza, familias con o sin hijos que viven en hogares sin empleo, personas que tienen dificultades de integración en el mercado de trabajo, mayores de 45… El curso concede una especial atención a personas que presentan un mayor déficit formativo y escasa experiencia laboral.

La metodología del curso está adaptada a los perfiles de los participantes, facilitando su desarrollo y la adquisición de competencias. A través de un clima de aprendizaje positivo, potenciando la interacción alumno-profesor. Cuenta asimismo con un espacio de escucha y reflexión, para mejorar y superar dificultades, proporcionando así una alta motivación a los participantes.

Sobre la Fundación Endesa

El objetivo principal de la Fundación Endesa, presidida por Juan Sánchez-Calero, es contribuir al desarrollo social a través de proyectos educativos, de formación para el empleo, medioambientales y culturales.

Los proyectos educativos de la Fundación están orientados fundamentalmente a fomentar la innovación en la educación a todos los niveles y a promover la excelencia académica en al ámbito universitario a través de ayudas, becas y cátedras.

Los proyectos de formación para el empleo ponen su foco en la promoción del talento de personas en riesgo de exclusión social, jóvenes emprendedores con escasos recursos y profesionales de más de 50 años.

Sus proyectos medioambientales están centrados prioritariamente en impulsar la educación y la cultura ecológicas.

En cuanto a sus proyectos culturales, destacan los dedicados a la iluminación de monumentos artísticos, a la conservación y difusión del patrimonio industrial histórico del sector eléctrico español y a la colaboración con entidades culturales españolas de primer nivel.

La Fundación Endesa lleva también a cabo el desarrollo y financiación de programas y acciones destinadas a la prestación de ayuda humanitaria, sanitaria, social, económica o material en situaciones extraordinarias de crisis sanitarias, catástrofes naturales u otras análogas.

Más información en: http://www.fundacionendesa.org/

Cáritas Diocesana de Huelva denuncia la falta de respuesta de las administraciones ante la reiteración de siniestros en los asentamientos

Huelva, 17 de julio de 2020. Ante el nuevo incendio registrado esta madrugada en el asentamiento de Lepe –el tercer siniestro de estas características en lo que va de semana— Cáritas Diocesana de Huelva denuncia la falta de respuesta de las Administraciones públicas para atajar las condiciones de grave exclusión y precariedad que están en la raíz de unos sucesos cada vez más frecuentes.

Como ya señalamos en distintas ocasiones, no podemos seguir tolerando que esta realidad de los incendios en los asentamientos chabolistas de inmigrantes en torno a los municipios freseros se convierta en un hecho cotidiano, sin que las Administraciones locales adopten las medidas inmediatas de acogida que eviten que estas personas temporeras tengan en una chabola su única alternativa de alojamiento en la provincia de Huelva.

Ante esta situación, Cáritas Diocesana de Huelva urge a los poderes locales a asumir su parte de responsabilidad en la solución de esta realidad y a tomar en cuenta las constataciones que Cáritas Diocesana de Huelva y el resto de entidades sociales que componen la ‘Mesa Por la Integración’ presentaron dentro del  informe sobre ‘La realidad de los asentamientos chabolistas en la provincia’.

Desde Cáritas Diocesana de Huelva  llevamos años  alertando y denunciando  la total vulneración total de derechos a la que se ven sometidas las más de dos mil personas que malviven en estos asentamientos chabolistas en campaña agrícola y que, a fecha de hoy, siguen poniendo rostro a una de las realidades de exclusión más escandalosas que se dan a nivel autonómico, nacional y europeo.

En plena crisis social tenemos que hacer real el no dejar a nadie atrás, por ello, pedimos a las administraciones locales la articulación con carácter de máxima urgencia de las medidas de acogida e integración de las personas temporeras que viven en nuestros municipios para lograr que sucesos como el registrado anoche en Lepe dejen de ser noticia. Este compromiso con la defensa de la dignidad humana y la seguridad personal de los trabajadores temporeros que vienen a convivir con nosotros es un reto humanitario que nos involucra a todos: fuerzas políticas, agentes económicos y sociales, organizaciones humanitarias, comunidades cristianas y ciudadanía.

En febrero el Relator Especial de la ONU sobre la Extrema Pobreza y los Derechos Humanos, Philip Alston, visitó los asentamientos chabolistas de Lepe. En esta visita describe que en “un asentamiento de migrantes en condiciones que rivalizan con las peores que he visto en cualquier parte del mundo. Están a kilómetros de distancia del agua y viven sin electricidad o saneamiento adecuado. Muchos han vivido allí durante años y pueden pagar el alquiler, pero dijeron que nadie los aceptará como inquilinos”. “Las condiciones que observé en Huelva son simplemente inhumanas”, constata Alston.

En Cáritas Diocesana de Huelva sabemos, por propia experiencia, que son posibles propuestas de acogida imaginativas y humanizadoras. Estamos convencidos de que en manos de todos está evitar que estas situaciones de indignidad y vulnerabilidad se perpetúen entre nosotros ante la pasividad de muchos.

La fuerza de nuestro voluntariado

En Cáritas, pensamos que cada persona tiene algo que aportar y nuestro voluntariado tiene el poder de hacer que las cosas se lleven a cabo, que nuestras acciones se realicen y nuestro trabajo pueda ayudar a las personas que más lo necesitan, apostando por los derechos humanos y su dignidad. Desde los Centros Parroquiales y desde los Proyectos Diocesanos, nuestro voluntariado ha continuado su labor durante la crisis que hemos vivido. Y hasta aquellos que no podían acudir por ser grupo de riesgo o por encontrarse fuera de la ciudad, han aportado toda su fuerza y conocimiento desde la distancia, mostrando su preocupación e interés cada día.

Desde las Cáritas Parroquiales

Durante la pandemia muchas Cáritas Parroquiales han continuado la labor de apoyo y acogida, incluso se han intensificado por la situación de precariedad en la que se han visto muchas familias. En estos momentos, siguen atendiendo la realidad que acontece en sus pueblos y sus parroquias. En la primera parte de la etapa fueron apoyados por un grupo de voluntariado joven y también por protección civil para la entrega de alimentos. Tenemos que recalcar que en todo momento el voluntariado ha seguido las medidas de protección que se proponían desde el Gobierno.

En las parroquias de Huelva Ciudad el trabajo se ha intensificado, las parroquias han tenido que atender a muchas personas más que se vieron afectadas por esta crisis. Por eso, una vez más, el trabajo voluntario es muy importante para el desarrollo de nuestra labor con aquellos que más lo necesitan.

Con el Voluntariado Joven

El grupo de voluntariado joven ha retomado su actividad después de estos meses. Sigue apoyando las diferentes actividades de Caritas Diocesana de Huelva, en este caso ayuda a las Cáritas Parroquiales en las necesidades alimentarias de las personas atendidas. En una de las últimas actividades que realizaron dentro de su voluntariado, prepararon bolsas de alimentos,  pero sin olvidarse de la parte más promocional del trabajo con las personas, ya que la alimentación iba acompañada por varias recetas que pudieran hacer con los ingredientes que se daban, por ejemplo, explicaron cómo hacer humus, potajes y ensaladas con garbanzos.  

En los Proyectos Diocesanos

La Casa de Acogida Santa María, la Casa Santa María de los Milagros y el Centro de Día Puertas Abiertas, no han cesado su actividad durante la crisis y siempre han estado apoyados por voluntarios comprometidos que no se han desvinculado de los proyectos, siempre, como decimos, respetando todas las medidas de seguridad. Desde el fin del estado de alarma, aquellos voluntarios y voluntarios que cesaron su actividad por la situación tan difícil que atravesábamos, han ido poco a poco retomando su labor para acompañar al proyecto. Muchas de estas personas nos dicen que estaban deseando reincorporarse para seguir trabajando con las personas.

Muchas gracias a todos, por estar y seguir creyendo en la labor que hacemos por aquellos que más lo necesitan. Sin vosotros, sin vuestro esfuerzo, no podríamos cubrir todas las realidades de necesidad que en estos momentos estamos atravesando.

Gracias de corazón.

Cáritas Diocesana de Huelva atendió el pasado año a 11.077 personas con una inversión total de 2.473.102 €

Huelva, 25 de junio de 2020. La directora de Cáritas Diocesana de Huelva, Pilar Vizcaíno junto con la Responsable del Departamento de Comunicación y Relaciones Externas, Peña Monje, han presentado la Memoria General 2019, un documento que recoge la realidad del trabajo de nuestra entidad y que supone una radiografía muy real de la situación de la Diócesis de Huelva contada desde el trabajo diario de los 75 equipos de Cáritas  Parroquiales que existen en la provincia y desde los Servicios Diocesanos.

Cáritas Diocesana de Huelva ha atendido en 2019 a 11.077 personas, lo que supone una reducción de 3.014 personas con respecto a 2018. Este hecho se produce por la tendencia de estos últimos años, donde ha habido un repunte en la economía, más acceso al empleo y menos personas que tienen la necesidad de acudir a Cáritas.

Este año, el grado de participación de las Cáritas  Parroquiales en la elaboración de la Memoria de Cáritas 2019 ha llegado al 88% del total, lo que hace ver el esfuerzo que están llevando a cabo los centros parroquiales en un ejercicio de transparencia. Hay que reconocer el trabajo de estos equipos, que hacen un esfuerzo continuo para atender a las personas más necesitadas de Huelva.

Las personas atendidas son aquellas que acuden a Cáritas, son los rostros que vemos y que, potencialmente, podrían formar parte de procesos de acompañamiento y participación. Por otro lado, debemos cuantificar las personas beneficiadas de la labor de Cáritas Diocesana de Huelva, que son aquellas que sin acudir directamente a Cáritas se ven beneficiadas por la acción que recibe algún miembro de la familia. Por último, tenemos en cuenta las atenciones realizadas que sumaron 124.805 en total, esto supone una subida de un 2% con respecto a la del pasado año. Esto se debe a que el trabajo con las personas atendidas se realiza de forma integral, acompañando las necesidades de manera específica desde nuestro modelo de acción social.

El marco social en el que Cáritas Diocesana de Huelva ha desarrollado su acción durante el año pasado ha venido marcado por una notable precariedad en muchas de las familias a las que atendemos y también una profundización en un modelo laboral basado en la escasez de recursos económicos de las familias y la falta de formación.

Con este escenario, Cáritas Diocesana de Huelva ha realizado su acción durante el pasado año priorizando el acompañamiento a las personas más vulnerables, proporcionando recursos para ayudarles a salir de su situación o paliar la gravedad de la misma, adaptándolos a sus necesidades y siguiendo con un modelo de trabajo centrado en el acompañamiento. Ya que las ayudas que Cáritas da no se basan solo en la alimentación, es un abanico amplio, que va desde los gastos en farmacia, ópticas, dentistas, electricidad, electrodomésticos, suministros, ayudas para el pago de los alquileres. En definitiva, llegando a esos gastos imprevistos que las familias no pueden asumir. 

Detectamos dos perfiles importantes. Por un lado personas solicitantes de asilo, sin ingresos, en su mayoría con formación pero sin homologar y con familias a su cargo. Por otro lado, son personas nacionales, en su mayoría mujeres con hijos a su cargo, mayores de 45 años, o jóvenes con carencias educativas, escasa experiencia laboral, falta de formación y, en gran medida, con cargas familiares. 

Atención especializada para la promoción y el desarrollo de las personas

Esta es la línea de trabajo que desarrolla Cáritas Diocesana de Huelva con el fin de favorecer la inclusión a las personas atendiendo las necesidades específicas del colectivo al que pertenecen. Así, Cáritas Diocesana de Huelva pone en valor cifras como las 125 personas, de los 311 participantes del Programa de Empleo, que encontraron trabajo el pasado año, la atención a 767 personas sin hogar a través del Centro de Día Puertas Abiertas y las Casas de Acogida, Santa María y Santa María de los Milagros; 1023 personas y familias acompañadas en proyectos de infancia, acompañamiento familiar y mayores y 993 migrantes en el Programa de Atención en Asentamientos.

Más de dos millones invertidos en personas

Cáritas Diocesana de Huelva invirtió el año pasado un total de 2.473.102 . Esta cifra es fruto de la inversión de fuentes públicas, privadas, de donaciones y legados y por supuesto, de los ingresos de las Cáritas Parroquiales. El desarrollo de nuestra acción y la inversión que dedicamos no sería posible sin el factor humano que hace posible que Cáritas esté al lado de quienes más lo necesitan.

Recalcar que un gran porcentaje de estos recursos provienen de las aportaciones directas de la comunidad cristiana onubense a través de campañas, colectas y acciones puntuales promovidas por la Iglesia de Huelva.

Una labor importante la desarrollan los voluntarios que participan en Cáritas Diocesana de Huelva, ya sea en la atención en Parroquias o en los distintos centros ubicados en las instalaciones de la calle Doctor Cantero Cuadrado, sin los cuales sería imposible llevar esta labor. En total, 757 voluntarios han participado en nuestra acción en el año 2019. También queremos agradecer la colaboración de 46 empresas en 2019, que han permitido, de una u otra manera, facilitar recursos muy necesarios a muchas familias y las donaciones y el apoyo de 242 hermandades.

El poder de cada persona, cada gesto cuenta

Es el lema de nuestra campaña de Caridad de este año “El poder de cada persona, cada gesto cuenta” que titula la memoria que hoy presentamos también por este motivo.

Con este mensaje queremos poner en valor la generosidad de miles de ciudadanos que han prestado sus servicios, donado sus recursos o articulado mecanismos desde la más absoluta creatividad para apoyar económicamente nuestra acción social.

Desde la institución agradecemos cada gesto y animamos a la ciudadanía a seguir colaborando con aquellos que están pasando por un mal momento debido a la crisis. Como reza nuestro lema entorno al día de la Caridad, cada persona tiene el poder de cambiar las cosas con pequeños gestos. Es momento de construir juntos y junto a quien más lo necesita.

#ElPoderDeCadaPersona

#CadaGestoCuenta

Cáritas Diocesana de Huelva y ASAJA-HUELVA colaboran en materia de empleo

La organización agraria y la institución promocional han rubricado un convenio marco destinado a conectar con mayor fluidez a empresas del sector agroforestal que necesiten personal con personas desempleadas

A la alta tasa de desempleo que habitualmente presenta la provincia de Huelva se ha sumado en los últimos meses la crisis del Covid-19, que ha ocasionado que aún más personas pierdan sus puestos de trabajo. Muchas de estas personas forman parte de colectivos especialmente vulnerables, con serias dificultades para encontrar empleo: se trata de mujeres, personas mayores de 45 años, migrantes o jóvenes, a los que Cáritas Diocesana de Huelva atiende habitualmente.

Paradójicamente, el sector agroforestal onubense se topa a menudo con serias dificultades para encontrar trabajadores para su contratación en empresas agrícolas, ganaderas o forestales, lo que afecta muy seriamente a su buen funcionamiento y genera, en situaciones muy críticas, incluso el abandono de hectáreas de cultivo.

Por estos motivos, y con la intención de crear las sinergias necesarias que favorezcan la resolución de ambas problemáticas, Asaja-Huelva y Cáritas Diocesana de Huelva han firmado un convenio marco de colaboración que servirá para poner en marcha acciones concretas encaminadas a cumplir los objetivos de ambas entidades, pero sobre todo, tanto la organización agraria como la institución promocional se han comprometido a entablar líneas de comunicación directa y a diseñar mecanismos que permitan el intercambio de información sobre la oferta y la demanda existentes en el mercado de trabajo de la provincia de Huelva.

De este modo, Asaja-Huelva podrá tener acceso a las distintas bolsas de trabajo de las que tenga conocimiento Cáritas, y, al contrario, Cáritas será informada de las ofertas de trabajo que realicen las empresas asociadas a Asaja-Huelva.

Con este acuerdo, al que se ha llegado tras una experiencia previa mantenida este año en la que se ha podido comprobar la fluidez y el buen entendimiento de ambas entidades, se procurará aliviar la situación de personas desempleadas y de sus familias, contribuyendo a su inserción sociolaboral y a su crecimiento personal y la mejora de su proyección de futuro.

Tanto el presidente de Asaja-Huelva, José Luis García-Palacios Álvarez como la directora de Cáritas-Huelva, Pilar Vizcaíno Macías, han querido mostrar su satisfacción por la firma del acuerdo y su confianza en que redundará en bienestar para todas las partes.

El poder de cada persona

No permitas que la realidad te deje indiferente

Ahora tienes el poder, la posibilidad y la oportunidad de mejorar el mundo y la vida de las personas que más sufren. Es el momento de sumar gestos, los tuyos y los nuestros, gestos de solidaridad, de fraternidad y de justicia. Es la hora del compromiso compartido, de tejer comunidades de esperanza que sean fuente de ternura y caridad, de amor gratuito y transformador.

Te invitamos a que participes en el cambio y te hagas activista de la caridad, que tomes partido y te comprometas a realizar gestos sencillos que reflejen tu amor y cuidado por la vida, la naturaleza y las personas que viven situaciones de fragilidad.

Vive con conciencia solidaria y humana, de forma proactiva, al estilo de Jesús: tomando partido por los más vulnerables.

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