Mañana, 1 de octubre se conmemora el Día Internacional de las Personas de Edad y Cáritas Diocesana de Huelva se suma en su apuesta por promover una sociedad más humana y justa para todas las edades.
Cabe recordar que las personas mayores son el pegamento entre nuestro pasado y nuestro presente yse merecen toda nuestra atención, escucha y amor. Por eso, desde el Programa de Familia de Cáritas Diocesana de Huelva se está impulsando el trabajo con las personas mayores, especialmente con aquellas en situación de mayor vulnerabilidad, tratando de empoderarlas, de evitar su aislamiento y favorecer su participación en la vida de la comunidad.
Este trabajo se viene desarrollando desde hace varios años en la zona de la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, donde se dan numerosos condicionantes específicos derivados del hábitat y de la insuficiencia de servicios y recursos en los pueblos que suponen un desequilibrio en cuanto a derechos y oportunidades y, por tanto, un riesgo para las personas mayores que viven en estos pueblos.
El proyecto pretende contribuir al bienestar cotidiano de las personas mayores de esta zona de manera que puedan mejorar los hábitos de vida saludable, físicos y mentales.
También se realizan talleres de memoria para trabajar con las personas mayores distintos aspectos y ayudarles a que no pierdan capacidades cognitivas propias de la edad.
Este proyecto también quiere sensibilizar a los más pequeños de la casa, por eso, organiza diferentes actividades para unir a las nuevas generaciones con nuestros mayores.
Un trabajo encomiable que es llevado a cabo por personal técnico y una gran red de personas voluntarias que ofrecen su tiempo a cuidar de las personas mayores y darles la dignidad y el respeto que merecen.
¡Muchísimas gracias!